Luego de que el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, declaró que al mantener la vigencia de la Ley de la Industria Eléctrica probablemente se abrirá una puerta a litigios sin fin, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que discrepa, de manera respetuosa, con sus señalamientos. Durante su conferencia de prensa mañanera en Palacio Nacional explicó que si se emprenden acciones jurídicas, el país haría “lo propio”, e insistió en que, de aprobarse su iniciativa de reforma eléctrica no se estaría violando ningún tratado comercial internacional.