El organismo reclasificó dos recomendaciones que se encontraban como parcialmente cumplidas a cumplidas en gran medida.
Debido a distintas disposiciones publicadas en los últimos años, el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI, por sus siglas en francés) contra el Lavado de Dinero y Financiamiento al Terrorismo ha elevado el cumplimiento de México en materia de prevención de blanqueo de capitales.
Este martes, el organismo presidido por T. Raja Kumar publicó su más reciente informe de seguimiento y recalificación del cumplimiento técnico de México, que da cuenta de los avances que ha tenido el país desde su última evaluación mutua, que fue en el 2017, respecto al cumplimiento de las 40 recomendaciones del grupo intergubernamental.
De acuerdo con el informe, México avanzó en cumplimiento en dos recomendaciones, para así registrar el siguiente nivel de cumplimiento:
- 10 recomendaciones totalmente cumplidas.
- 24 recomendaciones cumplidas en gran medida.
- 5 recomendaciones parcialmente cumplidas.
- 1 recomendación no cumplida.
Según el informe, para este último informe de seguimiento, México avanzó en el cumplimiento de dos recomendaciones, que se encontraban como parcialmente cumplidas, las cuales se reclasificiaron a cumplidas en gran medida.
- Recomendación 18: Controles internos para filiales y subsidiarias.
De acuerdo con el organismo, desde la última evaluación mutua a México, el país ha creado leyes y reglamentos que exigen que los grupos financieros implementen programas de prevención de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo en toda su estructura, además de garantizar la confidencialidad de la información intercambiada.
Sin embargo, para el GAFI todavía quedan algunas brechas menores por abordar, especialmente en la normativa que aplican para cooperativas de ahorro y préstamo (sofipos), financieras populares (sofipos), así como de otros proveedores de servicios financieros.
- Recomendación 24: Transparencia y beneficiario final de las personas jurídicas.
Respecto a esta recomendación, el GAFI destacó que México ha avanzado debido a que ha actualizado su Evaluación Nacional de Riesgos (ENR) para incluir información sobre el uso indebido de personas jurídicas.
La participación de la mayoría de las autoridades en el desarrollo de la ENR al respecto, ha contribuido al conocimiento integral de los riesgos del país”, se puede leer en el informe.
Asimismo, el organismo resaltó las modificaciones al Código Fiscal de la Federación que exigen la recopilación y mantenimiento de información básica y actualizada de beneficiarios reales, así como el registro de la misma ante el Servicio de Administración Tributaria.
En este contexto, el organismo acotó que todavía hay brechas para el cumplimiento total de esta recomendación, como la falta de requisitos para que un empresario pueda cooperar con las autoridades competentes respecto a la información relacionada con el beneficiario real de su empresa.
Además, para el GAFI todavía existe una brecha sobre la falta de seguimiento de la calidad de asistencia que recibe México de otros países, en investigaciones respecto a la titularidad real de una empresa.
“En general, México ha progresado en abordar la mayoría de las deficiencias de cumplimiento técnico identificadas en su informe de evaluación mutua”, acotó.
La mala nota
Desde su última evaluación mutua, México no ha podido avanzar en el cumplimiento de la única recomendación que tiene como no cumplida, que es la número 23, referente a distintos requisitos antilavado que se les exige a las actividades y profesiones no financieras designadas, que se conocen como actividades vulnerables.