El mandatario expresó su intención de una regulación más estricta de la venta y tenencia de armas de fuego.
Bajo presión para que actúe tras la masacre en Uvalde, el presidente estadounidense, Joe Biden prometió el lunes “seguir presionando” por una regulación más estricta de la venta y tenencia de armas de fuego, algo difícil dada la estrecha mayoría demócrata en el Congreso.
Biden, que visitó el domingo la localidad de Uvalde en Texas (sur) y pasó varias horas con los familiares de las víctimas del tiroteo que se saldó con 21 muertos, dijo que “el dolor era palpable”.
El martes pasado, 19 niños -de entre 9 y 11 años- y dos maestras fueron asesinados en la escuela Robb cuando un joven de 18 años les disparó, lo que sumió de nuevo a EE. UU. en la pesadilla recurrente de las matanzas escolares.