🔸 El ministro José Manuel Albares fue quien habló en nombre de su pueblo
#INTERNACIONAL | Por fin, un mea culpa —a medias—. Más de 500 años después, un integrante del gobierno español admitió lo que parecía inconfesable: hubo dolor e injusticia durante la Conquista de México. No fue el rey, ni el presidente, ni una carta sellada con escudo real. Fue el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, quien soltó la frase que muchos esperaban desde 2019.
“Ha habido dolor e injusticia hacia los pueblos originarios. Hubo injusticia, justo es reconocerlo y lamentarlo. Esa es parte de nuestra historia compartida, no podemos negarla ni olvidarla”, dijo.
Esto ocurrió durante la inauguración de una serie de exposiciones de arte precolombino en Madrid, donde el eje temático son las mujeres indígenas. El contexto diplomático tampoco es casual: la presidenta Claudia Sheinbaum dejó fuera al rey Felipe VI de su toma de protesta presidencial, como recordatorio de que aún está pendiente el famoso “perdón” que pidió AMLO en 2019.
En aquel año, el entonces presidente mexicano envió una carta al rey de España y otra al Papa: “Hubo matanzas, imposiciones. La llamada Conquista se hizo con la espada y con la cruz”.
La respuesta del gobierno español fue el silencio… y un comunicado con regaños: “La llegada, hace 500 años, de los españoles a las actuales tierras mexicanas no puede juzgarse a la luz de consideraciones contemporáneas”.
Desde entonces, la Casa Real ha evadido el tema, y ni una disculpa, ni un guiño. Hasta ahora, Albares ha sido el único que, al menos, soltó un “lo sentimos” diplomático, aunque sin usar la palabra “perdón”.
En un intento por relajar las tensiones, España y México montaron un megaproyecto artístico conjunto. Cuatro exposiciones en distintos museos de Madrid exploran el papel de la mujer indígena desde tiempos prehispánicos hasta hoy.
El ministro Albares afirmó que: “Reivindicamos el pasado de estas mujeres protagonistas de la historia, pero también su presente y futuro porque las culturas indígenas son culturas vivas”.
Los ejes de las exposiciones son contundentes:
El Museo Arqueológico Nacional: muestra la vida cotidiana y el poder de las mujeres indígenas.
Casa de México en España: aborda lo divino y la cosmovisión femenina.
Instituto Cervantes: exhibe textiles como narrativa visual de las culturas originarias.
Museo Thyssen-Bornemisza: presenta la historia y el ajuar de la “Reina Roja” de Palenque.
Mientras el arte honra a las mujeres del pasado, la política sigue en deuda con sus pueblos.
 
             
                                         
                                        