🔸 El bretón español ha localizado cientos de escapes en Saltillo y se ha convertido en un símbolo de innovación y sustentabilidad
#SALTILLO | En Saltillo, Coahuila, un aliado poco común se ha convertido en pieza clave para el cuidado del agua: “Manchas”, un perro bretón español de apenas un año y medio, entrenado para detectar fugas en la red hidráulica de la ciudad.
Este can forma parte de un innovador sistema que combina sensores instalados en más de 3 mil kilómetros de tuberías y tecnología satelital, con el fin de reducir las pérdidas de agua. Cuando los equipos técnicos acotan el área de posible fuga, entra en acción “Manchas”, que gracias a su olfato especializado puede ubicar con precisión el punto exacto del escape
En tan solo cinco meses de trabajo, el perro ha localizado más de 230 fugas, lo que equivale a recuperar alrededor de 14 litros por segundo, suficiente para abastecer a unas 3,200 familias.
El impacto económico también es significativo: el entrenamiento y mantenimiento de “Manchas” tuvo un costo cercano a los 500 mil pesos, mientras que perforar un nuevo pozo para obtener el mismo volumen de agua costaría entre 20 y 30 millones de pesos. Esto convierte la estrategia en un proyecto altamente rentable.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha reconocido a “Manchas” como Guardián del Agua, destacando su aporte en una ciudad que depende al 100 % de pozos subterráneos y que recibe lluvias muy escasas a lo largo del año.
Debido al éxito del programa, ya se contempla entrenar a un segundo perro con el objetivo de garantizar descansos adecuados y mantener la eficiencia del modelo, que podría replicarse en otras ciudades del país.
El caso de “Manchas” refleja la importancia de combinar innovación tecnológica y recursos naturales para enfrentar la escasez hídrica. En un entorno semidesértico como Saltillo, cada litro recuperado representa un avance en la sustentabilidad y en la seguridad del suministro para miles de familias.