Peritos de la FGE recolectaron 23 casquillos en lugar de los hechos.
Momentos de terror vivieron los habitantes de la colonia “El Encanto”, cuando un grupo de sicarios atentaron contra la vida de un policía y su familia, luego de llegar a bordo de motocicletas y accionar un “Cuerno de Chivo”.
Peritos de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGE) recolectaron 23 casquillos percutidos en el sitio, lo que generó una intensa movilización policiaca para dar con los pistoleros pero hasta el momento no hay detenidos.
Guido Renán Rosas López, director de Seguridad Pública reaccionó molesto y confrontó al reportero que le cuestionó sobre el hecho de que las víctimas de la agresión eran un policía y su familia. Los casquillos asegurados en la escena del crimen son calibre 7.62, que son utilizados por los rifles tipo AK (Avtomat Kalashnikova).
Balaceras, narcomantas con amenazas a la Guardia Nacional y ahora un ataque directo a un policía, son parte de las noticias criminales en esta semana en el municipio que Jesús Alberto Capella Ibarra, Secretario de Seguridad Pública de Quintana Roo, calificó la semana pasada como el más seguro de América Latina.
Una llamada al 911 realizada alrededor de las 21 horas del jueves alertó a las autoridades de que en la cerrada “Agaves” del Fraccionamiento “El Encanto”, se habían hecho detonaciones de armas de fuego, generando la presencia de fuerzas de seguridad de los tres niveles de gobierno.
“Hubo muchos disparos, yo estaba en la tienda y me escondí detrás de un carro. Fueron muchos disparos”, narró Juanito, un niño vecino de Felipe “N”, policía activo de Seguridad Pública.
De acuerdo con información que se filtró por los mismos compañeros del policía agredido y testimonios de vecinos, el uniformado se encontraba en el interior de su domicilio cuando se percató de que frente a su vivienda se estacionó una motocicleta de color negra grande tipo Bross.
De ella descendió un sujeto que caminó directo a la puerta y entró portando, supuestamente, un rifle AK por lo que trató de protegerse con una silla, logrando que el agresor saliera de la casa donde hizo varios disparos. Acto seguido subió a la motocicleta que era conducida por otro sujeto para después escapar.
Más tarde otra testigo manifestó que dos individuos más estaban afuera a bordo de otra motocicleta y que incluso uno de ellos lo amenazó con un arma corta para que se retirara del lugar.
Unos 90 minutos después del atentado salió del sitio Guido Rosas a quien se le solicitó información sobre el caso pero este declinó hacerlo con el argumento de “no entorpecer las investigaciones” (sic).
Al cuestionarlo de si la persona agredida era un policía, como lo aseguraban testigos y vecinos, el jefe policiaco se detuvo y con mirada y actitud retadora cuestionó: “te consta”. Hasta el cierre de esta edición no se había detenido a ninguna persona por este atentado directo a un miembro de la Policía Municipal.