El sufragio femenino fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el 17 de octubre de 1953
En el marco conmemorativo del Día Internacional de la Mujer es importante recordar la lucha social y política que han atravesado las mujeres para posicionarse en la vida pública, pues no fue hace mucho que el género femenino pudo ser participe del libre ejercicio democrático, un derecho universal estipulado la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Y es que comparado con la consolidación del estado mexicano, el sufragio femenino apenas cumplirá 70 años de haberse instaurado, poco tiempo sí se habla de todos los derechos que se han implementado para las mujeres en la vida política desde entonces.
Fue en 1953, en el sexenio de Adolfo Ruiz Cortines (1951- 1958), cuando fue publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el decreto donde se indicaba las modificación del Artículo 34 para efectuar el sufragio femenino en las elecciones municipales y nacionales.
“Son ciudadanos de la República los varones y las mujeres que, teniendo la calidad de mexicanos, reúnan, además, los siguientes requisitos: haber cumplido 18 años, siendo casados, o 21 si no lo son, y tener un modo honesto de vivir”
Cabe destacar que la modificación al artículo constitucional no solo permitía a las mujeres votar, sino que además les daba el derecho de ser candidatas a un cargo público, ya fuera estatal o federal. Sin embargo, estos reconocimientos fueron el resultado de una larga trayectoria de manifestaciones por grupos feministas de la época para hacer valido sus derechos electorales, una lucha que se vio materializada—en primera instancia—con la primera mujer candidata en las elecciones municipales en 1923.
30 años antes de que se hiciera derecho el voto femenino a nivel nacional, en el estado de Yucatán, en el gobierno de Felipe Carrillo Puerto, un importante movimiento feminista permitió a tres mujeres posicionarse como candidatas al Congreso del estado de Yucatán.
Elvia Carrillo Puerto, Beatriz Peniche de Ponce y Raquel Dzib Cicero fueron las primeras mujeres a postularse en la vida electoral, siendo la primera de ellas la seleccionada para ocupar el puesto de diputada al Congreso Local por el V Distrito, el 18 de noviembre del 20223. Cabe destacar que su cargo no duro mucho, pues dos años después de sus votación se retiró tras recibir amenazas de muerte, según fuentes históricas.
Elvia Carrillo Puerto fue una líder feminista nacida de Motul, Yucatán. Su interés en la política la llevó a convertirse en una luchadora sufragista que participó en el Partido Socialista del Sureste. Su activismo comenzó a lado de su hermano, Felipe Santiago Carrillo Puerto, electo gobernador del estado de Yucatán en 1921.
Hija de familia de clase media, Elvia Carrillo Puesto estudió en el Liceo de Niñas de Motul, en donde se desempeñó como una estudiante regida por la escuela de la poeta y feminista, Rita Cetina Gutiérrez, a quien utilizó como estandarte para nombrar posteriormente a su liga feminista, y seguir así con los estadios políticos de la mujer, en donde el tema del sufragio femenino era uno de los más importantes a discutir.
La lucha Elvia Carrillo por el voto de la mujer permitió que en su estado — Yucatán— se concretará, sin estipulado legal, la obtención del sufragio para las mujeres del estado, y por ende, la posibilidad de ser votadas. Pero, tras las persistentes protestas de la rebelión huertista en contra de Álvaro Obregón, el gobierno de Felipe Carrillo, y por ende el cargo de Elvia Carrillo, se vieron obligados a cesar ante los constantes acosos y persecuciones por opositores.
Sin embargo, la batalla de Elvia Carrillo siguió su protesta hasta conseguir el sufragio femenino, pues a su salida de Yucatán, llegó a refugiarse a la Ciudad de México. Ante sus actos, la Secretaría de Defensa y la Secretaría de Gobernación otorgaron el Mérito Revolucionario por su trayectoria el 22 de junio de 1952.