La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus sigla en inglés) abrió oficinas en México, dijo este viernes en el embajador en el país, Ken Salazar, mientras el gobierno local lucha por recuperar la categoría 1 de seguridad aérea que otorga esa entidad de la nación vecina.
La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador sostiene desde hace meses reuniones con la de Joe Biden para revertir la rebaja de estatus, que espera recuperar este año y que por ahora impide a las aerolíneas mexicanas sumar nuevos vuelos a Estados Unidos y limita su capacidad de sellar acuerdos comerciales.
“Es un orgullo anunciar que la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos abrió por primera vez en su historia una oficina en México, la cual servirá para fortalecer la cooperación con las autoridades y el sector privado de la industria de la aviación”, dijo Salazar.
“De esta forma, profundizaremos el diálogo y el trabajo conjunto para que nuestros países colaboren en materia de aviación civil”, agregó el diplomático en un comunicado de prensa en el que no había ninguna referencia directa a la calificación perdida por México en mayo de 2021.
Este año, el Congreso mexicano debería analizar también una reforma a la ley de aviación impulsada por López Obrador para permitir el “cabotaje”, una práctica controvertida que permite a las aerolíneas internacionales operar rutas nacionales y que las firmas locales han cuestionado.
Más tarde este viernes, en un mensaje en su cuenta de Twitter, Salazar detalló que sostuvo reuniones con directivos de las aerolíneas estadounidenses American Airlines, Delta y United, y las mexicanas Aeroméxico, Viva Aerobus y Volaris.
México es el país con más vuelos desde y hacia Estados Unidos, además del primer destino de los ciudadanos de ese país, según el comunicado. Uno de cada cuatro estadounidenses que se desplazaron al extranjero lo hicieron hacia algún destino mexicano, lo que representa cerca de 13 millones de viajeros.